¡Agenda tu cita ya!
En momentos de vulnerabilidad es común que nos exijamos demasiado, nos llenemos de autocrítica destructiva y nos castiguemos por nuestras supuestas fallas. Sin embargo, ¿qué pasaría si te dijera que la autocompasión puede ser tu mayor aliada en tiempos de adversidad? En este artículo identificaremos cómo la falta de autocompasión puede llevarte al autosabotaje y el deterioro de tu autoestima y exploraremos formas de entrenarla para acercarnos a nuestros valores vitales.
¿Qué es la autocompasión?
La autocompasión implica tratarnos a nosotros mismos con amabilidad y comprensión, en lugar de ser duros y críticos. Al contrario de lo que muchos piensan, la autocompasión no es un signo de debilidad, sino un acto de valentía y fuerza interior. Nos permite aceptar nuestras imperfecciones y reconocer que somos seres humanos dignos de amor y compasión, incluso en momentos de dificultad.
El némesis de la autocompasión es la autocrítica destructiva, ese diálogo interno negativo y despiadado que nos somete a un constante juicio y autoevaluación. Cuando nos permitimos ser víctimas de nuestra propia autocrítica, nos volvemos más propensos al autosabotaje. Nos atormentamos con pensamientos de no ser lo suficientemente buenos, nos castigamos por nuestros errores y nos llenamos de dudas y miedos que nos impiden avanzar. La autocrítica destructiva nos limita, nos aleja de nuestro potencial y nos impide disfrutar de una vida plena y auténtica. Sin embargo, al practicar la autocompasión, podemos liberarnos de esta trampa emocional y cultivar una relación más amable y compasiva con nosotros mismos.
Motivarte a practicar la autocompasión es primordial ya que la autocritica y el autosabotaje pueden tener un impacto negativo significativo en nuestra autoestima. Cuando nos sometemos a una constante autocrítica, nos llenamos de pensamientos negativos sobre nosotros mismos, creyendo que no somos lo suficientemente buenos o que siempre estamos cometiendo errores. Esta autocrítica implacable erosiona nuestra confianza y nos lleva a dudar de nuestras habilidades y valía personal. Como resultado, nos autosaboteamos, evitando oportunidades de crecimiento. La baja autoestima se arraiga, afectando nuestras relaciones, desempeño académico o laboral y bienestar emocional. Sin embargo, al cultivar la autocompasión y desafiar nuestra autocrítica, podemos reconstruir nuestra autoestima, liberarnos del autosabotaje y comenzar a reconocer y apreciar nuestro valor intrínseco.
¿Como podemos trabajar en la autocompasión?
La terapia de aceptación y compromiso (ACT) proporciona un enfoque poderoso para trabajar en la autocompasión. La autocompasión implica tratar nuestros pensamientos y emociones difíciles con amabilidad y aceptación en lugar de juzgarlos o evadirlos. En ACT, aprendemos a cultivar la conciencia plena y a observar nuestros pensamientos autocríticos sin identificarnos con ellos. Reconocemos que los pensamientos negativos no definen nuestra valía como personas.
Una herramienta clave es desafiar nuestras creencias limitantes. Cuestionar las creencias autocríticas que nos han mantenido atrapados en un ciclo de baja autoestima y autosabotaje. Al desafiar estas creencias, podemos reemplazarlas por afirmaciones más realistas y compasivas.
La aceptación radical es otra práctica importante. Aprender a aceptar nuestras emociones difíciles y las circunstancias desafiantes tal como son, sin resistencia. Al permitirnos sentir y experimentar plenamente nuestras emociones, sin juzgarlas ni tratar de cambiarlas, podemos desarrollar una mayor comprensión y compasión hacia nosotros mismos.
El autocuidado también es parte integral de la autocompasión. Priorizar el tiempo y las actividades que nos nutren y brindan alegría, esto coba un significado diferente de persona a persona, pero a manera general puede lograrse mediante la lectura, el ejercicio físico, la meditación u otras prácticas que fomenten nuestro bienestar emocional.
Recuerda que la autocompasión es una parte fundamental del proceso terapéutico. Si te encuentras siendo demasiado autocritico/a y te resulta difícil cultivar la autocompasión por ti mismo/a, no dudes en agendar una sesión. Estoy aquí para apoyarte en tu viaje hacia una mayor compasión y aceptación hacia ti mismo/a. Juntos/as podemos explorar estrategias y herramientas para fortalecer tu autocompasión y promover tu bienestar emocional. No estás solo/a en este camino, estoy aquí para acompañarte.
La autocompasión permite la aceptación de quien somos y el compromiso de acercarnos a aquello que valoramos, nos libera del autosabotaje y nos ayuda a cultivar una autoestima saludable. Ten presente que eres digno de amor, compasión y cuidado, especialmente en tiempos difíciles. Permítete ser tu propio aliado y regálate el poder transformador de la autocompasión.